A mediados de esta semana,y gracias a la colaboración de un grupo de voluntarios de Madrid y Segovia, dirigimos nuestros esfuerzos a recorrer una zona que por su difícil acceso en coche requería de dos días de marcha.
Para ello, aprovechamos la ocasión de hacer vivac en el monte y compartir experiencias loberas ( celebraciones incluídas).
Al día siguiente continuamos el muestreo, no sin cierta dosis de aventura, (dado lo accidentado del terreno), realizando un total de 35 km y la toma de datos de 16 excrementos de lobo.
Hemos de agradecer a todos los participantes su entusiasmo y su contribución al conocimiento de la especie.